Dia 143: Bocas del Toro (Cayo Zapatilla)

Bien temprano nos preparamos los panchitos para el almuerzo y nos cruzamos a ver que mejor precio podiamos conseguir sobre la hora, pero no solo no conseguimos precio sino que se cancelo la nuestra, asique nos mandaron con otros grupetes por un dolar mas caro, de 14 a 15.
De salir 9:30 terminamos saliendo 10:30 y de ahi en adelante a cortar los tiempos, nos dieron solo 15 minutos de delfines, que por suerte se dejaron ver bastante, despues de eso el clasico curro de parar para consumir, en este caso, parada en restaurant para encargar la comida que los que tienen plata pasarian a comer mas tarde, de ahi nos fuimos para el paraiso del archipielago, Cayo Zapatilla, el agua tremendamente hermosa, bien turquesa y la arena blanquita, un lindo paraiso, pero lo mejor no era eso, lo mejor son los peces de esa zona, hacer snorkel ahi
justifica cada dolar que sale la excursion, los colores y formas que ves son de las mejores hasta el momento.
Lamentablemente un grupo de burgueses, ja, querian irse rapido, seguramente tendrian ganar de comer lo encargado en el restaurant, y pasadas las 2 horas dejamos ese paraiso, pasadas las 2 horas porque insistimos un poquito mas, ja.
De ahi al restaurant, pero como los tipos se llevaban su comida y ya habian comido, mientras los burgueses comian, agarramos las mascaras de vuelta y nadamos por las aguas de Cayo Coral, y descubrimos porque se llama asi, los corales que se ven ahi son fabulosos, plantitas que salen y se esconden, pepinos de mar y un monton de cosas mas que no tengo ni idea de como se llaman, con este snorkel se paso un poco la bronca de la apurada en Zapatilla.
Como la excursion estaba bastante deformada porque eramos todos grupos distintos, el nuevo destino fue la playa de Red Froggs, a pedido de una pareja de japoneses, lamentablemente la entrada sale 3 dolares, y ya no teniamos un mango nosotros, decidimos quedarnos en el bote y cuando todos entraron y pagaron, se apiadaron de nosotros y nos dejaron entrar.
Si bien la playa no esta buena, hubo dos pavadas que justificaron aun mas la excursion, la primera fue la simpleza con la que nos mostraron de bajar un coco y romperlo para tomar su jugo, y la segunda fue ver que el nombre de la playa se debe realmente a un animal que existe.
La rana roja es verdad y es realmente hermosa, ja.
Tipo 5 volvimos para las casas, tomamos la leche y nos cruzamos a la isla principal, con ganas de ir a la feria, pero como queda tan lejos y de la gente que hablamos no les parece nada maravilloso, decidimos quedarnos por el centro de la Isla Colon.
Asi se paso el ultimo dia en este hermoso paraiso, manana bien temprano un poco de snorkel, y despues ya tramitar la ida a Panama City.
Chau