El nuevo dia de este barco amanecio bien distinto, ahora si el amazoans se parecia mas al amazonas, mucha selva, muchos arboles y mucho verde lo cual hacia mas linda la travesia, no digo aventura porque como me paso en el trayecto anterior los barcos tienen muchas comodidades que le saca bastante de aventura.
Siguiendo nuestro plan de ventas nos dispusimos a mostrarle a la gente como trabajamos y los frutos nos tardaron en aparecer, nuevos compradores y nuevas alegrias para las arcas de los hermanos.
Se armo un lindo grupete cultural con gente de Alemania, Portugal, Espana (Pais vasco) y otros dos argentinos de Rosario que estaban viajando de la forma uqe pensamos nosotros en un principio, sudamerica en auto.
Todos ellos se volvieron alumnos y aprendieron a hacer pulseras tambien, a esta altura la experiencia que mostramos en este rubro es admirable.
Csai parecidos pasaron estos dos dias de navegacion de este ultimo tramo, ya falando algo mas de portugues y aprovechando las ganas de conversar de muchos brasileros fuimos mejorando bastante, ja.
La obviedad que paso fue que no llegamos a la hora que teniamos que llegar sino que caimos 3:30 de la matina del 18 de octubre, por ende despues de escuchar tantas recomendaciones sobre Belem decidimos pasar la noche de nuevo en el barco, auqnue esta vez muchisima gente hizo lo mismo, parece que Belem se merece un respeto importante.
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